Agrobiodiversidad: ¿cómo garantizarla en tus cultivos?
La agrobiodiversidad se trata de prácticas agrícolas amigables con el medioambiente. Tiene como objetivo satisfacer las necesidades alimentarias de la población mundial y, al mismo tiempo, proporcionar beneficios económicos.
A continuación, profundizaremos en el tema y al final de este artículo tendrás las claves para implementar métodos sostenibles que aseguren un mejor futuro agrícola.
¿Qué es la agrobiodiversidad?
Es una práctica agrícola que consiste en cultivar variedad de especies vegetales en un área determinada.
No solo se refiere a la cantidad de especies en un mismo lugar, sino también a la variabilidad genética, los distintos ecosistemas en los que se desarrollan y una nueva cultura ambiental.
Dicho de otra manera, consiste en sembrar cereales, leguminosas, hortalizas, frutas y árboles en un mismo lugar.
Además, abarca la presencia de otras especies, como, polinizadores, controladores biológicos de plagas y microorganismos del suelo. Esta integración se traduce en sistemas más resilientes y sostenibles.
Beneficios de la agrobiodiversidad en la agricultura
Cuando se aplica la agrobiodiversidad como práctica agrícola, los beneficios son variados. A continuación, explicaremos los más importantes:
1. Mejora la salud del suelo
Tiene un impacto positivo en la salud del suelo, porque la presencia de diferentes tipos de raíces permite una mejor circulación de agua y oxígeno. Además, se aporta mayor cantidad de residuos orgánicos, se reduce la compactación y se aprovechan mejor los nutrientes.
2. Aumenta la resiliencia frente a plagas y enfermedades
Contar con diversidad de plantas ayuda a romper de forma natural los ciclos de vida de las plagas. La razón es que, las plagas no logran encontrar el huésped específico que necesitan para sobrevivir y se desorientan. Además, se limitan sus fuentes de alimentos.
3. Mayor productividad y estabilidad de los cultivos
La rotación de cultivos y la asociación de especies permite fijar nutrientes en el suelo, aumentar la materia orgánica, reducir la erosión y la degradación de la tierra.
En muchos casos, hay presencia de flores y plantas que atraen polinizadores, como, abejas, mariposas y colibríes. Esto es fundamental para un mayor rendimiento de los cultivos.
4. Promoción de la biodiversidad y conservación de especies
Los sistemas agrobiodiversos tienen la capacidad de crear nichos ecológicos ideales para albergar diferentes familias de plantas. Además, conectan áreas naturales fragmentadas y permiten el movimiento de especies.
A esto se le suma que, contribuyen a conservar especies en peligro de extinción al proporcionarles hábitats adecuados.
Un ejemplo de esto es el corredor biológico mesoamericano, que se extiende desde México hasta Panamá. Gracias a la agrobiodiversidad de esta zona, se dan pasos importantes en la conservación del jaguar, que es una especie catalogada como “casi amenazada” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN)
Estrategias para fomentar la agrobiodiversidad en tus cultivos
Existen diferentes formas para poner en práctica la agrobiodiversidad en la industria de la producción de alimentos, vamos a explorar las más comunes:
1. Rotación de cultivos
Consiste en variar el tipo de cultivo que se planta en una parcela por temporada. El objetivo principal es evitar el agotamiento de nutrientes y reducir la acumulación de plagas y enfermedades.
Por ejemplo, en los trópicos húmedos, la rotación de cultivos como el maíz y leguminosas es fundamental para evitar que las plantas extraigan del suelo los mismos nutrientes de forma repetida y agoten su reserva natural.
2. Policultivo y asociación de cultivos
Consiste en cultivar diferentes especies de plantas en el mismo espacio al mismo tiempo, se trata de una práctica que se ha realizado en todo el mundo por miles de años. En especial en Mesoamérica ha sido significativo para el desarrollo de sistemas agrícolas sostenibles y resilientes.
Un ejemplo específico del policultivo, consiste en el sistema denominada milpa. Se trata de sembrar maíz, frijoles y calabaza en la misma parcela de tierra. El objetivo es aprovechar los nutrientes de las tres especies.
3. Integración de cultivos perennes y agroforestería
Consiste en combinar árboles, arbustos y cultivos agrícolas en un mismo sistema de producción. Con este método se mejora la estructura del suelo y se ofrece sombra y refugio para la fauna.
Un ejemplo de integración de cultivos, es el que se usa en los climas muy secos. En las siembras de cacao, también se plantan árboles de sombra, como, por ejemplo, caoba y cedro. La razón es que el cacao requiere sombra para prosperar.
4. Uso de cultivos de cobertura y abonos verdes
Es un tipo de cultivo que tiene como objetivo aumentar la fertilidad del suelo, la capacidad de retener agua, incrementar la materia orgánica y reducir la presencia de plagas.
Entre los cultivos verdes más comunes se encuentran:
- Las leguminosas, como el trébol y la alfalfa.
- Las gramíneas, como el centeno, el trigo y la avena.
- Las crucíferas, como la mostaza y la colza.
- Las crasuláceas, como la sedum y las siemprevivas.
5. Conservación de semillas y diversidad genética
Se trata de ubicar las semillas en un lugar cuidadosamente seleccionado, que reúna las condiciones idóneas para preservarlas y protegerlas de cualquier factor que pueda afectar su integridad, como plagas, microorganismos o condiciones ambientales adversas.
Por lo general, se hace con variedad de semillas locales y tradicionales que permiten tener acceso a una amplia gama de características genéticas.
Un ejemplo de este tipo de prácticas es el Banco de Germoplasma de Papa Andina (BAPA) en Perú. Allí se alberga a unos 7 mil tipos de papa nativas de los Andes peruanos y de otros países de la región.
Casos prácticos de la agrobiodiversidad
En el mundo hay diversos casos prácticos de agrobiodiversidad que son ejemplo de que sí es posible recurrir a una agricultura más sostenible.
Algunos de los casos más emblemáticos son:
- El sistema milpa en México que combina maíz, frijoles y calabaza en un policultivo tradicional.
- En Ecuador, Perú y Bolivia, gran parte de la producción de cacao se hace bajo la sombra de árboles como la caoba o el cedro.
- En Colombia se están implementando sistemas silvopastoriles, que combinan la ganadería con la reforestación.
- En Kenia, el cultivo de sorgo se utiliza en sistemas agroforestales con árboles de leguminosas para mejorar la fertilidad del suelo.
Agobiodiversidad para un futuro sostenible
Adoptar prácticas de agrobiodiversidad ofrece un futuro de sustentabilidad agrícola para las nuevas generaciones y ayuda a cumplir las metas mundiales de seguridad alimentaria.
Hoy, en el mundo se desarrollan prácticas que contribuye a crear ecosistemas agrícolas más equilibrados y productivos como los que hemos abordado en este artículo. Entre ellos, los cultivos de cobertura y abonos verdes, conservación de semillas y otros.
Esperamos haber resuelto tus dudas y antes de despedirnos te invitamos a descubrir cómo Jacto México con innovadoras tecnológicas puede facilitar la adopción de estas prácticas.
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