¿Qué son las micorrizas y cómo son usadas en la agricultura?

La salud del suelo es fundamental para tener tierras fértiles y producir cultivos de calidad. Para tener una agricultura más sostenible, las micorrizas se han convertido en grandes aliadas de los agricultores, ya que son fundamentales para fortalecer esta relación simbiótica entre plantas y hongos.

¿Cómo pueden estas asociaciones beneficiosas transformar el panorama agrícola moderno? Las micorrizas, término que literalmente significa “hongo-raíz”, representan una simbiosis donde los hongos micorrícicos se unen a las plantas, facilitando un intercambio mutuo de nutrientes y agua, lo que mejora el aprovechamiento de nutrientes esenciales como fósforo y nitrógeno y aumenta la resistencia de las plantas a condiciones difíciles y peligros de la tierra.

En este post, te explicaremos en qué consisten las micorrizas, cuáles son sus beneficios, aplicaciones y cómo la maquinaria agrícola es útil en este caso.

¿Qué son las micorrizas?

Las micorrizas son relaciones esenciales entre hongos y plantas, una simbiosis que impulsa la salud de la tierra y la productividad agrícola gracias a su capacidad de descomponer los residuos vegetales.

En esta relación, los hongos micorrícicos, a cambio de azúcares derivados de la fotosíntesis, proporcionan a las plantas nutrientes esenciales como fósforo y potasio, y micronutrientes como calcio, hierro y zinc.

Se trata de un intercambio beneficioso, similar al generado por los hongos del género trichoderma, que mejora el uso de nutrientes y fortalece la resistencia de las plantas a enfermedades de la tierra y condiciones ambientales adversas.

Beneficios de las micorrizas en la agricultura

Las micorrizas ofrecen una serie de beneficios para las plantas y la agricultura. Esta simbiosis única entre hongos y raíces de plantas, aparte de fortalecer la salud de las plantas, también mejora la eficiencia de los cultivos agrícolas de diversas maneras. A continuación, te contamos cuáles son.

Mejoran el uso de nutrientes

Las micorrizas mejoran la capacidad que tienen las plantas de aprovechar nutrientes esenciales como fósforo, potasio, calcio, hierro y zinc de la tierra, proporcionando así un suministro continuo de nutrientes que promueve un crecimiento saludable.

Aumentan la resistencia a patógenos

Al fortalecer las raíces y mejorar la nutrición de las plantas, ayudan a aumentar su resistencia a enfermedades y patógenos de la tierra, reduciendo la necesidad de pesticidas y otros tratamientos químicos.

Optimizan la resistencia al estrés hídrico

Facilitan a las plantas una mejor adaptación y resistencia a condiciones de sequía o estrés hídrico, debido a que mejoran la retención de agua en el suelo.

Mejoran la composición de la tierra

Forman una estructura de suelo más estable y fértil al promover la agregación de la tierra y que se retenga la humedad, lo que mejora su capacidad para soportar cultivos saludables. De acuerdo al Instituto Canario de Investigaciones Agrarias, esto sucede gracias a la excreción de la proteína glomalina por parte de los hongos formadores de micorrizas.

Incrementan la capacidad fotosintética

Gracias a que son capaces de optimizar el empleo de nutrientes y agua, las micorrizas mejoran la fotosíntesis de las plantas, aumentando así la producción de biomasa y las propiedades de los cultivos.

Promueven la degradación de residuos vegetales

Contribuyen activamente a la descomposición de materia orgánica en el suelo, liberando nutrientes clave para el crecimiento de las plantas y manteniendo la salud de la tierra a largo plazo.

Optimizan el uso de fertilizantes

Al mejorar la eficiencia del uso de nutrientes, ayudan a minimizar la dependencia de fertilizantes químicos, lo que reduce costos y minimiza el impacto ambiental.

Aumentan la productividad agrícola

En conjunto, todos estos beneficios conducen a una mejora significativa en la productividad agrícola, con cultivos más vigorosos, rendimientos más altos y una mayor calidad de los productos cosechados.

Aplicaciones de las micorrizas en la agricultura moderna

Gracias a todos los beneficios que ofrecen, las micorrizas proporcionan una serie de aplicaciones que permiten optimizar la producción agrícola y enfrentar los desafíos del cambio climático y la seguridad alimentaria.

A continuación, veamos algunas de las principales aplicaciones de las micorrizas en la agricultura moderna:

• Aumento de la producción de cultivos: Las micorrizas han demostrado aumentar los rendimientos de los cultivos al mejorar el consumo de nutrientes y agua, lo que resulta en plantas más saludables y productivas.
• Rehabilitación de suelos degradados: Son utilizadas para rehabilitar suelos degradados por prácticas agrícolas intensivas o condiciones ambientales adversas, restaurando la fertilidad de la tierra y mejorando su estructura física.
• Reducción del uso de agroquímicos: Al mejorar la resistencia de las plantas a enfermedades y el aprovechamiento de nutrientes, las micorrizas pueden reducir la necesidad de pesticidas y fertilizantes químicos, promoviendo prácticas agrícolas más sostenibles y amigables con el medio ambiente.
• Biofertilización y biocontrol: Las micorrizas actúan como biofertilizantes al proporcionar nutrientes esenciales a las plantas de manera eficiente. Además, algunas especies también tienen efectos biocontroladores sobre patógenos de la tierra, protegiendo así las plantas.
• Adaptación al cambio climático: Facilitan la adaptación de las plantas a condiciones climáticas extremas, como sequías o inundaciones, al mejorar la eficiencia en el uso del agua y aprovechar nutrientes bajo estrés hídrico, tal como lo sugiere un artículo reciente publicado en la revista de ciencia y tecnología El Higo.
• Integración en sistemas agrícolas sostenibles: Son componentes clave de sistemas agrícolas sostenibles al promover la eficiencia en el uso de recursos y la conservación de la tierra, reduciendo la huella ambiental de la agricultura moderna.

¿Cómo ayuda la maquinaria agrícola?

Por medio de tecnologías avanzadas y prácticas agrícolas innovadoras, la maquinaria facilita la integración y aplicación eficiente de las micorrizas en los sistemas de cultivo.

Por un lado, las tecnologías de aplicación permiten la distribución uniforme de inoculantes de micorrizas en el suelo, asegurando una colonización óptima de las plantas. Esto permite maximizar los beneficios de las micorrizas al mejorar la absorción de agua y nutrientes, y reducir la competencia con otras especies microbianas en el suelo.

Por otro lado, los equipos de labranza y preparación de la tierra aseguran condiciones ideales para la simbiosis micorrícica, promoviendo una estructura física y química de la tierra favorable para el crecimiento y desarrollo de las micorrizas y las plantas.

Además, mediante la automatización de tareas agrícolas y la optimización de procesos, la maquinaria permite una aplicación eficiente y rentable de las micorrizas en grandes extensiones de cultivo.

Mejorando la salud del suelo y la productividad agrícola

Como hemos visto, las micorrizas son una innovadora solución natural que optimiza el consumo de nutrientes y agua y fortalecen la resistencia de los cultivos a condiciones difíciles.

De esta manera, las micorrizas marcan el camino hacia la agricultura sostenible y eficiente, donde la salud de la tierra y las propiedades de los cultivos se ven significativamente mejoradas.

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