Boquillas de pulverización, ¡todo lo que debes saber!
A simple vista, las boquillas de pulverización son componentes básicos y complementarios, pero la realidad es que se trata de pequeñas y sofisticadas herramientas, que optimizan las aplicaciones con tecnología de punta.
Por medio de estas podemos obtener distintas formas de chorro, profundidades de aplicación y grosores de gotas, permitiéndonos cubrir diferentes necesidades a la hora de proteger nuestros cultivos.
Para que conozcas más sobre este excelente recurso técnico, a continuación te explicamos con mayor profundidad qué es y para qué sirve y, luego, te dejamos una lista de las mejores boquillas de pulverización que hay en el mercado actual.
¡Lee hasta el final!
¿Qué es una boquilla de pulverización y para qué sirve?
Se trata de un pequeño recurso que se adapta a los pulverizadores, con la finalidad de adecuar la aplicación fitosanitaria a las características del cultivo.
También, en general, se emplea para optimizar la aspersión, debido a que aportan uniformidad y, en algunos casos, pueden reducir el riesgo de deriva.
En líneas generales, las boquillas de pulverización funcionan descomponiendo el líquido en pequeñas partículas para luego distribuirlas de forma uniforme y eficiente.
¿Por qué utilizar boquillas de pulverización?
El uso de los diferentes tipos de boquillas de pulverización conlleva múltiples beneficios y ventajas para los agronegocios, como:
Ahorro en productos fitosanitarios
Esto se debe a que las boquillas aportan precisión y aplicaciones adecuadas a las necesidades de profundidad y penetración.
Seguridad
Al reducir la deriva, la seguridad del operador se ve mucho menos comprometida cuando se utilizan este importante recurso para la actividad agrícola.
Reducción de huella ambiental
Así como el operador está mucho más seguro, el medio ambiente y los recursos naturales se ven menos afectados cuando las aplicaciones se lleven a cabo con la ayuda de boquillas que incrementan la precisión y reduce los índices de deriva.
Eficiencia operativa en general
Como ya sabes, optimiza las aplicaciones en líneas generales, fomentando la correcta protección de los cultivos y el desarrollo ideal de los mismos.
Esto refleja que una herramienta, en teoría, simple, como es el caso de las boquillas, puede tener un impacto significativo e importante en la productividad y el rendimiento de los ciclos de producción.
Por supuesto, para obtener todos estos beneficios no es suficiente el uso de boquillas de calidad. El pulverizador en sí también debe garantizar eficiente y estar adecuado a las necesidades del cultivo.
¿Cuáles son los principales tipos de boquillas de pulverización?
Ya sabes que las boquillas de pulverización son grandes aliadas en los ciclos de trabajo agrícolas, especialmente para la aplicación fitosanitaria.
Esto hace que hoy exista una amplia variedad de estas en el mercado, que atienden diversas necesidades y que pueden adaptarse a los diferentes pulverizadores, incluso a los más modernos, robustos y potentes.
Algunos de los tipos de boquilla básicos y comunes, que siempre conviene tener presente, son los siguientes:
Cono vacío
Debe su nombre a que distribuye de forma uniforme las partículas, formando la superficie exterior de un cono.
Esto quiere decir que el diámetro o área cubierta por el chorro, en el plano perpendicular, será proporcional a la distancia de la boquilla, al igual que al ángulo de aplicación.
Cono lleno
En este tipo de boquillas de pulverización, el cono interno está constituido uniformemente por partículas líquidas.
El radio de aplicación está en función del ángulo y la distancia de la aspersión y el área cubierta es perpendicular al chorro.
Chorro plano
La dimensión longitudinal de su aplicación varía acorde al ángulo de aspersión y la distancia.
En tanto, el área cubierta resulta perpendicular al chorro y tiene una forma de elipse alargada, a lo cual debe el nombre de chorro plano.
En el caso de la anchura del chorro, cambia según la distancia entre la boquilla y el área a aplicar la protección fitosanitaria.
Anti deriva
Son anti deriva porque mezclan el aire del ambiente con el líquido a ser aplicado, generando una aplicación de gotas gruesas y pesadas, eliminando casi que toda la deriva en la aplicación.
A su vez, de acuerdo al modelo, las anti deriva y las otras boquillas de pulverización mencionadas pueden variar la intensidad y presión de sus caudales.
El diámetro de las gotas, lo cual se conoce como micrones, también cambia ligeramente de acuerdo al modelo y sus características. En líneas generales, las gotas de aplicación generadas varían su tamaño de acuerdo a la presión de trabajo, cuanto más alta la presión, más fragmentada queda la gota, y más fina queda.
Tamaño de gotas
La máxima dice que mientras mayor sea el tamaño de la gota menor será el riesgo de deriva y, por consecuencia, de pérdidas y contaminación.
No obstante, no siempre la gota más voluminosa es la mejor opción, pues todo depende de las necesidades del cultivo, las características medioambientales y el tipo de labor.
De acuerdo a su tamaño, las gotas pulverizadas se clasifican de la siguiente manera:
- Muy fina: menor a 150 micrones;
- Fina: de 150 a 250 micrones;
- Mediana: entre 250 y 350 micrones;
- Grande: van de 350 a 425 micrones;
- Muy grande: de 425 a 500 micrones;
- Extremadamente grandes: más de 500 micrones.
¡Muy bien! Estas son algunas de las boquillas de pulverización que pueden resultarte de gran ayuda a la hora de proteger tus cultivos, que ofrecen precisión, ahorro y menor contaminación, entre otras ventajas.
Como ves, estas herramientas, de acuerdo a su tipo, atiendes distintas necesidades, por lo cual lo ideal es que cuentes con varias de estas y las utilices según la dinámica de trabajo.
¿Este material te resultó útil y de provecho? Si quieres conocer más sobre las mejores boquillas de pulverización del mercado o tienes alguna duda acerca del tema abordado, ¡no tardes en escribirnos en la casilla de comentarios! ¡Te ayudaremos con gusto!